Bluetooth. Al igual que el Wi-Fi, el Bluetooth está prácticamente en todas partes. Es la conexión inalámbrica utilizada por una amplia gama de auriculares, teclados y ratones inalámbricos. Puedes utilizarlo para transferir archivos de un móvil o un smartphone a otro sin necesidad de conectarte. Muchos relojes inteligentes también utilizan Bluetooth para conectarse a su smartphone.
La ventaja de Bluetooth es que su ancho de banda de datos es mayor que el que pueden ofrecer Zigbee y Z-wave. Y aunque no puede igualar el ancho de banda de datos del Wi-Fi, tampoco consume tanta energía como éste.
El problema es que Bluetooth no siempre es fiable en su conectividad. Por eso, los jugadores más experimentados sólo confían en los teclados y ratones con cable para los juegos FPS serios, en los que una fracción de segundo de vacilación en la transmisión de comandos puede conducir a la muerte virtual.
También está el problema del alcance, por lo que su uso se ha limitado sobre todo a los accesorios para PC y smartphones. La mayoría de los dispositivos están en la categoría de clase 2, lo que limita su conectividad a apenas 10 metros. Muchos la consideran una red bastante segura por su corto alcance, su cifrado único y su modo no detectable, pero todavía tiene algunos problemas de seguridad que resolver.
Ahora existe una versión de Bluetooth Low Energy (BLE) que también se llama Bluetooth 4.0. Como su nombre indica, no gasta tanto las baterías. Pero el alcance sigue siendo un problema, y es posible que tus cámaras de seguridad no puedan extenderse por una propiedad grande cuando usas Bluetooth para conectarlas a tu concentrador.