Los televisores inteligentes llevan incorporada la conectividad a Internet a través de un adaptador Wi-Fi interno, y la mayoría incluyen también puertos Ethernet. Esta conectividad permite el reconocimiento de contenidos (CAR), de modo que el televisor puede ofrecer información adicional sobre los programas de televisión en directo, sin la ayuda de un receptor de cable. El firmware interno del televisor también puede actualizarse por sí mismo, para mantenerse seguro y al día.
Además, la conexión a Internet permite utilizar aplicaciones preinstaladas como Netflix, HBO Now, Hulu, YouTube, etc. El televisor no necesitaría un periférico como un Chromecast o un Roku para poder reproducir contenidos online.
Aparte de los tipos de medios que puede transmitir sin un implemento de hardware de terceros, las pantallas, los altavoces y las interfaces suelen ser similares a los televisores estándar.